UNA NUEVA ERA EN LA REGULACIÓN ENERGÉTICA EN MÉXICO: ¿ESTÁS LISTO?
En marzo de 2025, México cerró un capítulo histórico en materia energética y abrió otro con gran impacto en el futuro del país. Con la publicación de las nuevas leyes secundarias en el Diario Oficial de la Federación, se dio por concluido el ciclo iniciado con la Reforma Energética de 2014. Esta transformación no solo redefine el marco regulatorio, también presenta oportunidades y desafíos clave para ingenieros, consultores, gestores energéticos y empresas del sector.
El Fin de un Modelo, el Comienzo de Otro
Durante más de una década, el sistema energético mexicano operó bajo reglas que permitían la participación de diversos actores en la comercialización de energía, mientras que el Estado conservaba el control sobre la infraestructura por razones de seguridad nacional. Sin embargo, esta etapa ha concluido oficialmente. Desde el 18 de marzo, una nueva ley energética está en vigor, dejando atrás tanto la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) como sus disposiciones anteriores.
Y lo más sorprendente: pocos han notado su impacto real…
El Proceso Legislativo que Marcó el Cambio
La reforma fue aprobada por la Cámara de Diputados el 10 de octubre de 2024, tras una intensa discusión nacional. Posteriormente, el Senado ratificó el paquete de leyes secundarias el 26 de febrero de 2025. Finalmente, el 18 de marzo, se publicó formalmente, dando paso a un nuevo sistema normativo para el sector energético.
Esta no es una modificación menor. Se reformaron los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, estableciendo nuevas reglas para el uso de energéticos, tanto fósiles como eléctricos. A partir de esta fecha, México no solo tiene una nueva ley: tiene un nuevo rumbo energético.

¿Y Ahora Qué Sigue?
Una parte crucial que no debe ignorarse se encuentra al final de estas nuevas leyes: los artículos transitorios. Estas disposiciones indican que, en tanto no se publiquen nuevas normativas, se deben seguir cumpliendo las disposiciones vigentes anteriores. En otras palabras, el cumplimiento sigue siendo obligatorio y las auditorías regulatorias continúan.
Esto implica que todos los actores del sector —ingenieros, especialistas, asesores y empresas— deben mantenerse alerta, adaptarse, y actualizar sus estrategias de cumplimiento. La transición no se trata únicamente de leyes: se trata de entender cómo impactan en cada operación.
Oportunidades Reales para los Especialistas del Sector
Este momento es mucho más que un cambio legal. Es un llamado a la acción.
Aquellos que entiendan a fondo esta nueva legislación tendrán una ventaja competitiva. No solo podrán cumplir con los nuevos requerimientos, sino que podrán posicionarse como asesores estratégicos ante un mercado ávido de orientación. Gestionar relaciones entre usuarios finales y nuevas dependencias, asesorar sobre cumplimiento normativo, y detectar riesgos u oportunidades a partir del nuevo marco legal puede convertirse en una nueva línea de negocio.

La ingeniería, como disciplina, tiene muchas aristas, y conocer esta dimensión normativa puede abrir puertas a proyectos clave en esta etapa de redefinición. A veces los ingenieros pierden de vista que la ingeniería es tan amplia que basta con buscar una más de las aristas que ofrece esta disciplina. Para detonar oportunidades de crecimiento empresarial o de negocio. El conocer la ley, el saber aplicarla, el tener la capacidad de asesorar a los usuarios finales, a los usuarios intermedios, de gestionar la relación entre las diferentes dependencias y las nuevas dependencias, es un modelo de negocio muy innovador.
Este artículo, más que darte los detalles de qué pasó, está enfocada a despertar en ti a quien está leyendo esto, a ti, especialista del sector, en ti que ya nos sigues desde hace tiempo, en ti que nunca habías escuchado nada, el saber que hay nuevas oportunidades de mercado, que hay elementos nuevos que cumplir y dónde deberás de buscarlos.